Para alcanzar una igualdad real y verdadera entre los géneros, es necesario que todo el mundo, hombres y mujeres, remen en la misma dirección, pero, la masculinidad hegemónica que se ha construido durante siglos, en donde los hombres “de verdad” son fuertes, protectores y proveedores, rudos, violentos y despreocupados y todo lo pueden no encaja con la realidad actual, conduce a identidades insanas, relaciones violentas y frena el desarrollo de la igualdad.
Estamos en 2019 y la idea tradicional de hombre ya no sirve. Por eso, las nuevas masculinidades buscan una alternativa a ese modelo hegemónico que incorpore la perspectiva de género. El siglo XXI y la Igualdad necesitan hombres nuevos con identidades sanas, que apuesten por la horizontalidad, el consenso y la corresponsabilidad personal, familiar y laboral, que sean empáticos y que están presentes en los espacios de cuidado, de limpieza y de atención a otras personas.
Además, para poder frenar la escalada de violencia machista, los hombres deben apostar por eliminar de su ser todo atisbo de violencia, de cualquier tipo, de la vida.
Por ello, desde la Asociación Colectivo para el Desarrollo Rural de Tierra de Campos, trabajamos por la igualdad entre niños y niñas, mujeres y hombres mediante la realización de diversos talleres y actividades que de manera transversal se llevan a cabo por el territorio de Castilla y León.